A veces siento que algunos familiares y amigos entran en
frustración por la forma en la que he vivido y vivo mi vida pero es que creo
que lo veo más o menos así:
Muchas cosas en la vida se nos han dicho, pero pocas se
nos han explicado. Cuando estás en la escuela se trata de sacar buenas
calificaciones, pero no te explican que la razón es entender cómo funciona la
vida, cuestionarla y prepararte para ella. Cuando sales de la escuela es
requisito ir a la universidad, pero no
te explican que no se trata del título, el anillo, ni el birrete, ni la toga,
es lo que harás y a quién ayudarás con el conocimiento privilegiado que estás
obteniendo. Cuando sales a buscar trabajo tendrás que buscar el más elegante,
el más desafiante, el más deslumbrante, de mejor remuneración, pero nadie te
explica que debes amar y disfrutar lo que hagas, que ese trabajo debe dejar
saldo positivo en la sociedad que lo realices y si trabajas para alguien debes
querer trabajar para ese alguien.
Cuando te haces mas grande, debes casarte, tener ese
vestido blanco y esa gran boda, pero nadie te explica que se trata de saber
escoger el novi@, de cómo te vas a sentir al despertar cada mañana con otra
persona, ir a dormir cada noche con otra persona, y encargarte de las
necesidades todos los días de otra persona y que aun así después de un año,
cinco años, diez años, disfrutas hacerlo, y que por eso no debes confundir
enamoramiento con convivencia y compatibilidad. Cuando tienes pareja te dirán
que la felicidad más grande para la familia será tener un bebe, pero no te
explican que tendrás que esforzarte para que la familia sea en cambio la
felicidad más grande de esa pequeña persona para que crezca como un adulto
pleno y satisfecho, prepararte para dar y olvidar que el bebe te dé algo a
cambio, ya sean buenas calificaciones, la profesión que creas más le conviene,
el novi@ que crees es el correcto y te cae mejor, el trabajo que puedas decir
estar orgullo delante de terceros, la boda a la que invitarás a tus amigos y
harás creer a la sociedad que criaste a una persona de bien o el nieto que
exigirás para que así tu tengas una segunda oportunidad.
Al fin y al cabo, la Vida, no se trata de las
calificaciones, los títulos, los cargos, el dinero, las posiciones sociales, las
metas cumplidas que fueron desarrolladas en el laboratorio del “éxito” humano
del siglo XX. Se trata de ese café con tu amigo, las personas que están en tu
corazón y las que te tienen en el suyo, las travesuras que cometiste, las
verdades que defendiste, los grandes sueños descabellados, los libros que
leíste, las cosas que escribiste, las plantas que sembraste, los animales que
cuidaste, los atardeceres y los cielos por los que viajaste, las otras verdades
que aprendiste y el que se quedó en casa no aprendió. Si nos explicaran todas
esas cosas, la humanidad se ahorraría el estar destruyéndose los unos a los
otros y a veces hasta a nosotros mismos, Así que aburre cuando aparecen los “¿Qué
estás haciendo por tu vida? ¿Cuándo vas a hacer el postgrado? ¿Cuándo vas a
tener un mejor trabajo? ¿Para qué vas a perder tu tiempo estudiando eso?
¿Cuándo te vas a casar? ¿Cuándo te vas a enseriar? ¿Cuándo tendrás un bebe?
¿Por qué no te vas del país? Tienes que hacer otra cosa, tienes que buscarte a
otra persona, perdiste tu tiempo, Se te acaba el tiempo… se te acaba el tiempo…”
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